SE EMPIEZA A LIMITAR EL USO DE CIGARRILLOS ELECTRÓNICOS EN LUGARES PÚBLICOS
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| Limitan el uso de los cigarros electrónicos en lugares públicos |
Poco a poco se
van concretando usos y contenidos. Pero entre los análisis parciales que se van
conociendo, algunas sustancias que emiten algunos cigarrillos (hay una enorme
variedad y no hay texto alguno que los regule) son claramente tóxicas,
irritantes, alergénicas e incluso cancerígena. Y se citan nitrosaminas,
dietilenglicol, niquel, cadmio, acetaldehído, formaldehído o acroleína. Demasiadas
incógnitas para no hacer nada.
La Generalitat de Cataluña no
quiere esperar a que el Congreso o el Ministerio de Sanidad tome alguna postura
sobre el uso de estos arltilugios. La complejidad legal de
igualar las limitaciones del uso del electrónico al tabaco aún no está resuelta.
Por ejemplo, cabría prohibir su uso en los
hospitales que este verano ya se autoaplicaron esa limitación
voluntariamente a la propuesta de los
médicos y demás equipamiento sanitario.
También se podría
extender a las bibliotecas, escuelas, museos, otros edificios públicos.
Reconocen en Salud que están estudiando todas esas posibilidades y que hay que
poner de acuerdo a muchas partes. Pero quieren tomar la delantera.
Hace un par de días
los expertos del consejo asesor sobre tabaquismo entregaron a este departamento
un informe y una lista de propuestas sobre cigarrillos electrónicos. En él se
hace hincapié en que se prohíba la venta a los menores. Se apoyan en el hecho
de que muchas de las sustancias conocidas que emiten con el vapor estos
cigarrillos electrónicos son tóxicas y cancerígenas. Y citan, además,que un
reciente estudio estadounidense hace referencia a grupos de adolescentes ya
iniciados en este tipo de consumo. También proponen que en los puntos de ventas
no se pueda indicar que esos cigarrillos sirvan para dejar de fumar ni que son
seguros. La semana próxima Salud anunciará medidas para
vedar su uso en escuelas, bibliotecas o museos.
Muchas consultas desde diferentes lugares, como bibliotecas universitarias o como
empresas, que no saben que deben hacer ante un empleado que enciende el
artilugio y suelta el vapor. Algunos países han tomado decisiones inmediatas de
este tipo para limitar el uso a la espera de saber algo más concreto sobre lo
beneficioso y lo perjudicial de los e-cigarrillos. “ La Generalitat no quiere
demorarse, por eso estamos estudiándolo y buscando el concierto en todos los
departamentos”, insiste el Dr. Mateu.El meollo del problema jurídico está en el
uso de estos cigarrillos en los bares y lugares de trabajo, así como, en si la
Generalitat tiene potestad para regular este producto en ellos.
Los expertos asesores manifiestan a que los
cigarrillos electrónicos sean la puerta de entrada al tabaquismo y, sobre todo,
que haya una vuelta al consumo público del tabaco en lugares cerrados por la
confusión que genera ver a una persona soltando humo. Aunque sea vapor.
Los especialistas
señalan la actitud cívica que mantienen la mayoría de los ciudadanos en
Cataluña, que no están utilizando el cigarrillo electrónico en aquellos lugares
donde no se puede fumar, a pesar de la proliferación masiva de tiendas de estos
productos y, por lo tanto, su más fácil acceso. La ley antitabaco aprobado en
el 2010 se aplica sin conflictos aparentes en todos los espacios públicos, y ha
hecho patente que lo normal es no fumar. Al menos es lo que hace el 70% de la
población.
LA VANGUARDIA -
VIERNES 15 NOVIEMBRE 2013
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